Unwell/Mb20

martes

Maquinaciones

Entonces recuperé la consciencia. Miré alrededor y todo parecía normal, sólo faltaba ella; la casa con mi familia estaba en la misma dirección que desde hace 15 años. Mis amigos dispersos con la normalidad necesaria. El trabajo tan próximo como lo recordaba. Todo era normal. Sólo me hacía falta ella.

Uno tras otro, los llamados se agolparon en mi mente y las respuestas se diluían en mi boca. Un segundo de tranquilidad bastaba para que mis ojos se refugiaran tras mis párpados. Ni hambre, ni frío. Sólo la necesidad imperante de borrar esa ausencia.

Afuera quizás llovía. Dentro de mí, definitivamente, llovía. Comencé, de pronto, a caminar sin rumbo, pensando en estupideces que, de vez en cuando, se convierten en las mejores ideas de tu vida. Maquinando estrategias para recuperarla. Destrozando lo que soy… Me tocaron el hombro. Seguí caminando. Me tomaron del brazo. Hice como sí volteaba, pero seguí caminando. En el aire mi nombre dibujado por una dulce voz. Voltee. Ahí estaba ella, mirándome con aquella expresión sin expresión. ¿La besaré en la mejilla o en la boca?. Me besó en la mejilla con cariño. ¿Cariño?. Tuvimos una conversación casual, tan casual como el encuentro. Al despedirnos, dijo quererme. ¿Cariño?. Yo me alejé con una vaga sensación de tranquilidad y la sonrisa acalambrada de tanto forzarla. Cuando ya estaba lo suficientemente lejos para que fuese imposible, me nació uno de esos impulsos epopéyicos y cuan final de película, corrí por las calles pretendiendo encontrarla. Maquiné tomarla entre mis brazos, besarla y antes que pudiese pensar preguntarle si aún me amaba. Sólo podía decirme que si. Todo volvería a ser un sueño. Corrí. Corrí sin detenerme. Hasta que por fin la vi. Nos separaba sólo una calle. Me arrojé al tránsito. Pude ver sus ojos a lo lejos. Sé que ella lo sintió. Entonces recuperé la consciencia. Mire alrededor y todo parecía normal, solo faltaba ella…


[Uno de mis preferidos. Resumen de un periodo oscuro de mi vida. Escrito espontáneamente y publicado en cuanto espacio virtual o impreso he tenido]

4 comentarios:

Anónimo dijo...

es raro como este ensayo me une a mi lengua materna, el llanto.
ese llanto q me hizo encontrar el amor real q creì jamàs acabarìa pero bien sabes q ya no serà, pero weno

deseo comentarte cosas hermosas y alegres como tu y tu volàtil espìritu


y de pasaìta recordarte q me debes el resto de una carta o ensayo, porq en realidad no recuerdo q era, q aùn no me entregas...


te re quiero

adiòs

Victoria López dijo...

decir que he leido este cuento 50 veces es poco.

tú hiciste que me creyera protagonista de él.

tú hiciste que me viera reflejada, que cuando iba leyendo me imaginaba siendo "ella"...

es cuático...

eso me pasó...

o eso pasó realmente?

chan-chan-chan!

te quiero muchito

gracias

gracias

gracias

Victoria López dijo...

ah!!

graciasssss!!

gracias!!

Victoria López dijo...

se me olvidaba!

gracias!!

xD!